El Señor Brahmā es el devoto del Señor más elevado del universo, y, por lo tanto, la Personalidad de Dios respondió a las cuatro preguntas principales con cuatro importantes declaraciones, conocidas como el Bhāgavatam original en cuatro versos. He aquí las preguntas de Brahmā: (1) ¿Cuáles son las formas del Señor tanto en la materia como en la trascendencia? (2) ¿Cómo actúan las diferentes energías del Señor? (3) ¿Cómo manipula el Señor Sus diferentes energías? (4) ¿Cómo ha de instruirse Brahmā para que lleve a cabo la tarea que se le ha confiado? El preludio a las respuestas está constituido por este verso en cuestión, en que el Señor le informa a Brahmā que el conocimiento acerca de Él, la Suprema Verdad Absoluta, tal como se afirma en las Escrituras reveladas, es muy sutil, y no puede entenderse a menos que uno se vuelva autorrealizado por la gracia del Señor. El Señor dice que Brahmā puede tomar las respuestas tal como Él las explica. Esto significa que el conocimiento trascendental acerca del absoluto Ser supremo puede adquirirse, si lo da a conocer el propio Señor. La Verdad Absoluta no puede ser entendida mediante la especulación mental de los más grandes pensadores mundanos. Los especuladores mentales pueden llegar hasta el nivel de la comprensión Brahman impersonal, pero, en realidad, el conocimiento completo de la trascendencia se encuentra más allá del conocimiento del Brahman impersonal. Por ello se denomina la sabiduría suprema y confidencial. De entre muchas almas liberadas, puede que alguien sea apto para conocer a la Personalidad de Dios. En el Bhagavad-gītā, el propio Señor dice también que de entre muchos cientos de miles de personas, puede que una busque la perfección de la vida humana, y de entre muchas almas liberadas, puede que una lo conozca tal como Él es. Por ende, el conocimiento acerca de la Personalidad de Dios puede adquirirse solo mediante el servicio devocional. Rahasyam significa servicio devocional. El Señor Kṛṣṇa instruyó a Arjuna en el Bhagavad-gītā, debido a que Él observó que Arjuna era un devoto y un amigo. Uno no puede penetrar el misterio del Bhagavad-gītā sin no poseer esas cualidades. De manera que, uno no puede comprender a la Personalidad de Dios, a menos que uno se vuelva devoto y ejecute servicio devocional. Ese misterio consiste en el amor por Dios. En él se encuentra la principal cualidad necesaria para conocer el misterio de la Personalidad de Dios. Y para alcanzar la etapa del trascendental amor por Dios, deben seguirse los principios regulativos del servicio devocional. Los principios regulativos se denominan vidhi-bhakti, o el servicio devocional del Señor, y un neófito puede practicarlos a través de sus sentidos actuales. Esos principios regulativos se basan principalmente en oír y cantar de las glorias del Señor. Y esa audición y canto de las glorias del Señor solo pueden ser posibles en compañía de devotos. Por lo tanto, el Señor Caitanya recomendó cinco principios fundamentales para alcanzar la perfección en el servicio devocional del Señor. El primero es el relacionarse con devotos (oír); el segundo es el canto de las glorias del Señor; el tercero, oír el Śrīmad-Bhāgavatam de labios del devoto puro; el cuarto, residir en un lugar sagrado relacionado con el Señor; y el quinto, adorar a la Deidad del Señor con devoción. Esas reglas y regulaciones son partes del servicio devocional. Así pues, tal como lo pidió el Señor Brahmā, la Personalidad de Dios explicará todo lo relacionado con las cuatro preguntas que hizo Brahmā, y también con otras que son partes integrales de las mismas preguntas.