Julio de 1973. Cerca de París, en un retiro monástico, Śrīla Prabhupāda conversa con el cardenal Jean Daniélou: «…La Biblia no dice únicamente: “No mates al ser humano”. Dice en general: “No matarás”,… ¿por qué interpreta usted esto a su propia conveniencia?».
Śrīla Prabhupāda: Jesucristo dijo: «No matarás». Así que ¿por qué los cristianos matan animales?
Cardenal Daniélou: Desde luego que en el cristianismo está prohibido matar, pero nosotros creemos que existe una diferencia entre la vida de un ser humano y la vida de los animales. La vida de un ser humano es sagrada debido a que el hombre está hecho a imagen de Dios; por lo tanto, está prohibido matar a un ser humano.
Śrīla Prabhupāda: Pero la Biblia no dice únicamente: «No mates al ser humano». Dice, en general: «No matarás».
Cardenal Daniélou: Nosotros creemos que sólo la vida humana es sagrada.
Śrīla Prabhupāda: Ésa es una interpretación suya. El mandamiento dice: «No matarás».
Cardenal Daniélou: Es necesario que el hombre mate a los animales para tener qué comer.
Śrīla Prabhupāda: No. El hombre puede comer granos, verduras, frutas y leche.
Cardenal Daniélou: ¿Ninguna carne?
Śrīla Prabhupāda: No. Los seres humanos deben comer alimentos vegetarianos. El tigre no viene a comerse sus frutas. La carne animal es el alimento que él tiene prescrito. Pero la comida del hombre consiste en verduras, frutas, granos y productos lácteos. Así que, ¿cómo puede decir que matar animales no es pecado?
Cardenal Daniélou: Nosotros creemos que es cuestión de la motivación. Si la matanza de un animal se hace para dar comida al hambriento, entonces está justificada.
Śrīla Prabhupāda: Pero piense en la vaca: bebemos su leche; por lo tanto, es nuestra madre, ¿está usted de acuerdo?
Cardenal Daniélou: Sí, por supuesto.
Śrīla Prabhupāda: Así que, si la vaca es su madre, ¿cómo puede usted respaldar que la maten? Usted toma leche de ella, y, cuando está vieja y no puede darle leche, le corta el cuello. ¿Es ésa una proposición muy humana? En la India se aconseja a aquellos que comen carne que maten animales inferiores, como las cabras, los cerdos, o incluso el búfalo. Pero la matanza de la vaca es el pecado más grande de todos. Al predicar conciencia de Kṛṣṇa, pedimos a la gente que no coma ninguna clase de carne, y mis discípulos siguen estrictamente este principio. Pero si, bajo ciertas circunstancias, otras personas se ven obligadas a comer carne, entonces deben comer la carne de algún animal inferior. No mate vacas. Es el pecado más grande de todos. Y mientras un hombre sea pecador, no puede entender a Dios. La principal misión del ser humano consiste en entender a Dios y amarlo. Pero si permanecemos como pecadores, nunca seremos capaces de entender a Dios, ¡qué decir de amarlo!
Cardenal Daniélou: Yo creo que quizás ése no es un punto esencial. Lo importante es amar a Dios. Los mandamientos prácticos puede que varíen de una religión a otra.
Śrīla Prabhupāda: Así pues, en la Biblia, el mandamiento práctico de Dios es que usted no debe matar; por lo tanto, la matanza de vacas es un pecado para usted.
Cardenal Daniélou: Dios dice a los hindúes que matar no es bueno, y dice a los judíos que…
Śrīla Prabhupāda: No, no. Jesucristo enseñó: «No matarás». ¿Por qué interpreta usted esto a su propia conveniencia?
Cardenal Daniélou: Pero Jesús permitió el sacrificio del cordero pascual.
Śrīla Prabhupāda: Pero él nunca mantuvo un matadero.
Cardenal Daniélou: [Se ríe.] No, pero sí comió carne.
Śrīla Prabhupāda: Cuando no hay más comida, alguien puede comer carne para no morirse de hambre. Eso es otra cosa. Pero es de lo más pecaminoso mantener mataderos regularmente sólo para satisfacer su lengua. En verdad, ni siquiera tendrán una sociedad humana hasta que se detenga esta cruel práctica de mantener mataderos. Y, si bien la matanza animal puede que a veces sea necesaria para la supervivencia, al menos el animal madre, la vaca, no debe ser matado. Eso es simplemente decencia humana. En el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa es una práctica nuestra no permitir la matanza de ningún animal. Kṛṣṇa dice: patraṁ puṣpaṁ phalaṁ toyaṁ yo me bhaktyā prayacchati: «Deben ofrecérseme verduras,frutas, leche y granos con devoción» (Bg. 9.26).Nosotros comemos sólo los remanentes de la comida de Kṛṣṇa (prasādam). Los árboles nos ofrecen muchas variedades de frutas, pero los árboles no son matados. Por supuesto, una entidad viviente es comida de otra entidad viviente, pero eso no significa que usted puede matar a su madre para comérsela. Las vacas son inocentes; ellas nos dan leche. Usted toma su leche, y luego las mata en el matadero. Eso es pecaminoso.
Discípulo: Śrīla Prabhupāda, el cristianismo sanciona comer carne basándose en la idea de que las especies inferiores de vida no tienen un alma como la del ser humano.
Śrīla Prabhupāda: Eso es una necedad. Primero que todo, tenemos que entender la prueba de la presencia del alma dentro del cuerpo. Luego podremos ver si el ser humano tiene un alma y la vaca no. ¿Cuáles son las características diferentes entre la vaca y el hombre? Si encontramos una diferencia en las características, entonces podremos decir que en el animal no hay alma. Pero si vemos que el animal y el ser humano tienen las mismas características, entonces ¿cómo puede usted decir que el animal no tiene alma? Los signos generales son: el animal come, el ser humano come; el animal duerme, el ser humano duerme; el animal se aparea, el ser humano se aparea; el animal se defiende, y el ser humano se defiende. ¿Cuál es la diferencia?
Cardenal Daniélou: Nosotros admitimos que en el animal puede que exista el mismo tipo de existencia biológica que en el hombre, pero no hay alma. Nosotros creemos que el alma es un alma humana.
Śrīla Prabhupāda: Nuestra Bhagavad-gītā dice: sarva-yoniṣu. «En todas las especies de vida existe el alma». El cuerpo es como un traje. Usted tiene ropa negra; yo estoy vestido con ropa azafrán. Pero dentro de la vestimenta usted es un ser humano, y yo también soy un ser humano. De igual manera, los cuerpos de las diferentes especies son como diferentes tipos de vestimenta. Existen 8.400.000 especies, o vestimentas, pero dentro de cada una de ellas hay un alma espiritual, una parte integral de Dios. Supóngase que un hombre tiene dos hijos, uno más capacitado que el otro. El primero puede que sea un juez de la corte suprema, y el otro puede que sea un obrero común, pero el padre los acepta a ambos como hijos suyos. Él no hace diferencias diciendo que el hijo que es juez es muy importante y el hijo obrero no es importante. Y si el hijo juez dice: «Mi querido padre, tu otro hijo es inútil; déjame cortarlo en pedazos y comérmelo», ¿accederá el padre a eso?
Cardenal Daniélou: Desde luego que no, pero la idea de que toda vida es parte de la vida de Dios nos resulta difícil de admitir. Hay una gran diferencia entre la vida humana y la vida animal.
Śrīla Prabhupāda: Esa diferencia se debe al desarrollo de la conciencia. En el cuerpo humano hay una conciencia desarrollada. Hasta un árbol tiene alma, pero la conciencia del árbol no está muy desarrollada. Si usted corta un árbol, éste no se resiste. En verdad, sí se resiste, pero sólo en un grado muy pequeño. Hay un científico de nombre Jagadish Chandra Bose que ha hecho una máquina que muestra que los árboles y las plantas son capaces de sentir dolor cuando son cortados. Y podemos ver directamente que cuando alguien va a matar a un animal, éste se resiste, grita, hace un sonido horrible. Así que es cuestión del desarrollo de la conciencia. Pero el alma se encuentra presente dentro de todos los seres vivientes.
Cardenal Daniélou: Pero, metafísicamente, la vida de un hombre es sagrada. Los seres humanos piensan en un plano más elevado que los animales.
Śrīla Prabhupāda: ¿Cuál es ese plano más elevado? El animal come para mantener su cuerpo, y usted también come con objeto de mantener su cuerpo. La vaca come pasto en el campo, y el ser humano come carne de un inmenso matadero lleno de máquinas modernas. Pero el solo hecho de que usted tiene grandes máquinas y una escena horripilante, mientras que el animal simplemente come pasto, no significa que usted es tan adelantado que sólo dentro de su cuerpo hay un alma, y que no hay alma dentro del cuerpo del animal. Eso es ilógico. Podemos ver que las características básicas son las mismas en el animal y en el ser humano.
Cardenal Daniélou: Pero sólo en los seres humanos encontramos una busca metafísica en pos del significado de la vida.
Śrīla Prabhupāda: Sí. Así que metafísicamente indague por qué usted cree que no hay alma en el animal, eso es metafísica. Si usted está pensando metafísicamente, eso está muy bien. Pero si usted está pensando como un animal, entonces ¿de qué sirve su estudio metafísico? «Metafísico» significa «por encima de lo físico», o, en otras palabras, «espiritual». En la Bhagavad-gītā, Kṛṣṇa dice sarva-yoniṣu kaunteya: «En cada ser viviente hay un alma espiritual». Eso es entendimiento metafísico. Ahora bien, o usted acepta las enseñanzas de Kṛṣṇa como metafísicas, o usted tendrá que tomar por metafísica la opinión de un necio de tercera categoría. ¿Cuál acepta usted?
Cardenal Daniélou: Pero, ¿por qué Dios crea a unos animales que comen a otros animales? Pareciera ser que hay un error en la creación.
Śrīla Prabhupāda: No es un error. Dios es muy bondadoso. Si usted quiere comer animales, entonces Él le dará plena facilidad para ello. Dios le dará el cuerpo de un tigre en su siguiente vida, de manera que pueda usted comer carne muy libremente. «¿Por qué estás manteniendo mataderos? Te daré colmillos y garras. Ahora ¡come!». Así que a los que comen carne les espera semejante castigo. Las personas que comen animales se vuelven tigres, lobos, gatos y perros en su siguiente vida, para tener mayor facilidad.